Redactar un plan de negocio puede ser un trabajo duro o puede ser muy ameno.
Un plan eficaz puede llevar a su empresa a la grandeza. Uno deficiente puede llevarle a la quiebra. No tener un plan es como pedir el fracaso incluso antes de empezar.
No todas las empresas necesitan un plan de negocio de 200 páginas. Sin embargo, toda empresa debe tener una idea de adónde quiere llegar y cómo va a hacerlo. Este artículo cubre algunas ideas clave para escribir un plan de negocio que lleve a su empresa a donde quiere estar.
La primera etapa de cualquier plan es el ANÁLISIS.
Es necesario que eches un vistazo muy objetivo a una serie de factores que pueden afectar a tu negocio. Hay muchos factores a tener en cuenta, pero los dos principales son la competencia y el entorno operativo.
- Veamos primero la competencia.
Todas las empresas tienen competencia, incluso si crees que tu producto o servicio es único. ¿Cómo es esto? En realidad, es muy sencillo: la gente tiene que elegir. La elección más fundamental que hacen en la mayoría de los casos es comprar lo que usted ofrece o algo más. Por ejemplo, puedo comprar una consola de videojuegos o comprar alimentos. Los clientes sólo disponen de una cantidad de dinero, así que lo primero que hay que hacer es preguntarse cómo es mi competencia y si puedo vencerla. Cuanto más entienda a su competencia, más podrá desarrollar su estrategia comercial para ser diferente y superarla.
- Ahora veamos el entorno operativo.
Se trata de entender qué factores en torno a su área de operaciones pueden afectar a los resultados de su negocio. Para algunas empresas esto incluye mirar alrededor del mundo, en otros casos es sólo su vecindario local. Hay que plantearse preguntas como las siguientes
¿Cómo va la economía?
¿Cómo es la confianza de los consumidores?
¿Hacia dónde se dirige la tecnología en mi sector?
Después de responder a todas las preguntas, tiene que decidir cómo pueden influir negativa o positivamente en su rendimiento.
Ahora que sabe más sobre su competencia y su entorno operativo, es el momento de establecer algunos OBJETIVOS.
Esto es lo que quiere conseguir en el periodo que abarca su plan de negocio. Se dice que los buenos objetivos son SMART. Es decir, específicos, medibles, alcanzables, realistas y dirigidos. He aquí un ejemplo de objetivo SMART para una empresa hipotética.
A finales de este año incrementaremos las ventas del producto X en un 7,5% con respecto al año anterior.
Puede ver lo claro que es este objetivo. Es mucho más fácil lograr un alto rendimiento con objetivos claros.
Ahora tiene que esbozar su ESTRATEGIA dentro del Plan de Negocio.
¿Cómo va a alcanzar su(s) objetivo(s)? Aquí es donde entra en juego el plan de marketing, ya que ayuda a describir los programas que se ejecutarán para alcanzar los objetivos deseados. Siguiendo con el ejemplo anterior, nuestra estrategia puede consistir en conseguir la distribución de nuestro producto en una nueva cadena minorista importante.
Para que su estrategia funcione, debe asignar los RECURSOS adecuados. Para alcanzar su objetivo será necesario disponer de ciertos elementos. Pueden ser dinero, personas, equipos, etc. Su plan debe incluir los recursos que está asignando y por qué cree que son adecuados para obtener el resultado.
Todos los planes de negocio tienen también algunas PROYECCIONES.
Se trata de los datos financieros básicos que su plan va a proporcionar. ¿Espera obtener beneficios o pérdidas? ¿Cuánto?
Por último, hay que tener en cuenta las CONTINGENCIAS.
Las cosas cambian constantemente y tu plan debe tener en cuenta estas posibilidades por adelantado. Una buena manera de hacerlo es preguntarse ¿Qué pasa si?
¿Y si un nuevo competidor entra en nuestro mercado?
¿Y si un distribuidor retira nuestro producto?
¿Y si suben los tipos de interés?
Su análisis debería darle una idea de las posibles contingencias. Ahorrarás mucho estrés si tienes algunas ideas documentadas para afrontarlas antes de que se conviertan en un gran problema.
Redactar un buen plan de negocio nunca va a ser perfecto, el plan está sobre el papel y usted está operando en el mundo real. Sin embargo, un buen plan puede guiarle en la dirección correcta. Tómese el tiempo necesario para preparar su plan y, sobre todo, asegúrese de utilizarlo después.